Apatzinguenses luchan por
continuar con su vida habitual
RED 113
MICHOACÁN/Redacción
Apatzingán, Mich.- 8 de
enero de 2015.- Luego de los tiroteos del pasado 6 de enero, en la ciudad de
Apatzingán prevalece la zozobra, los comercios comienzan a abrir, pues los
vendedores de productos diversos no tienen de otra y deben luchar por continuar
con sus vidas con la normalidad posible, ya que tienen que esforzarse por
llevar el pan a sus mesas, después de constantes hechos violentos en aquella
región de la tierra caliente michoacana, que parece condenada a esa repetitiva
historia de sangre y miedo.
Los comerciantes son los
que mayormente se dicen hartos de toda esa situación; narran, sin dar nombres
ni entrevistas directas, que la gente honesta de Apatzingán lógicamente es la
más perjudicada, pues pelean por sacar a sus familias adelante, pero la
economía simplemente está detenida, ya que ellos mismos aseguran que las ventas
son muy bajas y el dinero por ende no fluye.
Negocios de ropa, de
muebles, de zapatos y otras cosas afirman que en sus comercios sus ventas han
disminuido a más del 70 por ciento y exigen al gobierno reactivar la economía,
lejos del tema limonero.
Por otro lado, los
hoteleros son los que se han visto poco menos afectados y sus empleados
aseveran que dentro de lo malo sus cupos están semicubiertos, pero en gran
medida gracias al hospedaje que representa la prensa estatal, nacional e
internacional, que cubre los eventos violentos de la tierra caliente.
Así pues, la vida
continúa en Apatzingán porque simplemente todo debe seguir en esa sociedad que
desde hace muchos años está malherida por las balaceras, las extorsiones, los
secuestros y la delincuencia, misma que apenas se levanta de una, cuando ya cayó
en otra